¿El final?

Hola a todos!!!

Hoy os voy a hablar sobre la tercera edad.

Foto de Pixabay

Teóricamente, si hay que relacionar la tercera edad con los años, se dice que comienza a partir de los 60 años, sin embargo, la edad cronológica no debe definir ninguna etapa de nuestra vida ya que en cada persona es diferente.

He elegido este tema ya que creo que cada vez se le da menos atención e importancia a las personas mayores, es decir, creo que cada vez las personas se sienten más solas.

Normalmente, las personas adultas y los jóvenes nos centramos tanto en nuestros problemas y en nuestras obligaciones que no les prestamos la suficiente atención a los mayores. 

Tenemos una vida tan ajetreada que cada vez nos da menos tiempo de tener un poco tiempo de ocio y el que tenemos lo aprovechamos para hacer nuestras actividades cuando podríamos invertir ese tiempo en nuestros mayores.

Por ejemplo, cuando necesitan unos cuidados más específicos por determinada enfermedad o porque ya no pueden hacer determinadas tareas, muchos familiares deciden llevarlos a las residencias de ancianos ya que debido a sus horarios no pueden atenderlos como es debido.

Cuando ya los hijos han formado su propia familia, ya por fin llegan los nietos, pero pueden que no los vean tanto como ellos quisiera. Muchos nietos ven a sus abuelos un día a la semana un ratillo porque no tienen más tiempo, los días de diario tienen unas rutunas que consisten en colegio y actividades extraescolares. 

Sin embargo, nos encontramos con los casos opuestos en los que los abuelos son los que tienen que llevar a sus nietos al colegio y tienen que cuidarlos la mayoría del tiempo ya que los padres trabajan todo el día.

Ante esto, nos encontramos con dos casos muy opuestos, en el primero nos encontramos con la soledad que sufren las personas mayores ya que sus hijos tienen su vida hecha y no tienen tiempo para pasar con ellos, y en el siguiente, nos encontramos a unos abuelos que crían a sus nietos debido al trabajo de sus hijos.

¿No hay termino medio?

A los abuelos hay que visitarlos, preguntarles qué tal están... estar con ellos y que vean a sus nietos ya que les hacen mucha ilusión, sin embargo, los abuelos no los tienen que criar ya que eso es un deber de los padres.

La soledad es un sentimiento muy duro por el que no deberíamos pasar ya que nunca debemos estar solos, mínimo tenemos una familia. La soledad se hace muy dura sobre todo en las personas mayores ya que es en la etapa de la vida que puede que se sientan inútiles sobre todo si padecen alguna enfermedad, ya que no pueden hacer nada en comparación a antes que tenían que trabajar, cuidar de su familia.... Sin embargo para contrarrestarlo, se realizan muchos viajes del imserso en donde se planean viajes para las personas mayores en donde pueden disfrutar de compañía, realizando actividades, viajando y descubriendo lugares nuevos que antes a o mejor no podían...

 

Muchos mayores se sienten solos y viven solos, es un problema que debe de importar a la soledad porque puede que no seamos esas personas ahora mismo pero llegará el momento en el que esas personas seremos nosotros.

 

Ante esto, hay que replantearse la soledad de los mayores. Hay muchas asociaciones que ayudan a combatir esta soles, por ejemplo, hay muchos voluntarios que pasan un tiempo con estas personas, y lo que más hacen es hablar, ya que es lo que más necesitan porque al estar solos no hablan. 

Podemos aydar a estas personas siendo voluntarios para pasar tiempo con ellas pero primero debemos empezar por pasar tiempo con nuestros abuelos y después ya podremos ayudar a los demás.

Como conclusión, creo que a los abuelos hay que quererlos como se debe y pasar tiempo con ellos para que no se sientan solos, estar atentos de ellos y cuidarlos como ellos nos han cuidad.

WEBGRAFÍA

https://www.cdc.gov/aging/spanish/features/lonely-older-adults.html

https://www.copmadrid.org/wp/la-soledad-no-deseada-en-los-mayores-un-problema-de-todos/

https://cuideo.com/blog/soledad-como-afecta-salud-personas-mayores/

https://fundacionlacaixa.org/documents/2278030/2299518/soledad-personas-mayores.pdf